Lo siento AMOR, pero ya pasaste de moda…

Venía yo conduciendo, pensando y riéndome de este tipo de situaciones que se producen tantas veces a lo largo de la vida de un soltero. Y es que, querido amor, siento decirte que has pasado de moda. Que hoy en día lo importante es tener un buen trabajo, un buen sueldo y muchos amigos con quienes salir, compartir y viajar, que si tú no estás ¡no pasa nada! Porque en esta sociedad querido, lo que nos enseñan es a labrarnos un futuro en el que si tú estás bien, pero sino también.

Como vivimos en la sociedad de los valores, lo primero es lo primero. Así que todo el mundo entiende que una persona se traslade por tener un trabajo mejor, que se vaya del país por encontrar nuevas oportunidades, que se dedique a lo que realmente quiere. Pero espera, ¿me han dicho que vas a renunciar a tener un buen trabajo por un tal amor? Pero ¿quién se ha creído que es ese???

Y ésta es la realidad, que has pasado de moda. Que antes la mayoría de las personas vivían pensando que tenías que existir en su futuro porque encontrar su pareja era la finalidad de la vida. Y como los grises no nos gustan, pues ahora ¿para qué queremos una pareja pudiendo ser solteros y felices? Es más, no se nos ocurre la locura de buscarte porque ¡apareces cuando menos se te espera! Y es que ya nos hemos encargado de aprender a no esperarte…

Querido amor, creo que en tu lugar se puso de moda la «hipocresía». Y es que ahora nos gusta más engañarnos a nosotros mismos. No es porque seamos capaces de ser independientes que ¡es algo estupendo! Es que nos convencemos a nosotros mismos de que estamos bien solos y no necesitamos compartir a nivel íntimo nuestra vida con nadie. Eso sí, tu compañero el sexo está mejor valorado. Lógicamente todo el mundo entiende que es necesario. Mucho más que tú. Porque las necesidades físicas son admisibles, pero ¡ay amigo!, las del corazón no.

Pues bien, aunque «hayas pasado de moda» te diré, que creo que más del 95% de las personas siguen queriéndote en sus vidas. Que aunque las desmontes por completo y muchas veces nos hagas sufrir también haces que nos sintamos vivos. Te diré, que nos han enseñado a vivir con un escudo protector y a ser fuertes. Que hemos aprendido a que no nos hagas daño, a no necesitarte, hasta a ignorarte. Pero también debo decirte que, la felicidad plena, solamente la vivimos cuando tú estás presente.

Así que no estés triste amor, porque no todo se reconoce en la vida aunque se sienta. Y, además, tú y yo sabemos algo… Y es que las modas quedan en el armario un tiempo pero, al final, siempre vuelven 😉